Será que ayer Ale me lleno de vida los dedos otra vez, con el aire de su sonrisa, que a pesar de estar casi a 9000 km, consigue contiagarme de alegría.
Será que he conseguido dar un gran paso para mi... pero me apetece volver a escribir, casi para mi misma, no creo que nadie ya mire las paginas inactivas de este blog de viaje que se quedó parado con la llegada del invierno.
Será también que mi corazón quiere agradecerle a un amigo(grandisima persona que tiene que dejar el corazón en casa, porque no le entra en el pecho) lo que ha hecho por mi durante este frio hostil:
Frio climático, frio del silencio de los amigos lejanos, frio de la pena por no tener la familia un poquito mas cerca, frio de aislamiento, frio de luto por la tierra que he dejado, frio de cielo gris y pesado que no invita a la alegría.
Pues este amigo, además de su apoyo incondicional, me ha enseñado a fijar lo que sienten mis ojos.... me queda un largo camino, largísimo, pero ya veo el trazado.
La alegría de sentir la cámara en mis manos, sabiendo que podré contar con ella, no luchar a brazo partido para ponernos de acuerdo en el recuerdo de una luz, de un color.... Volver a enamorame de procesados y revelados, antes en plata, ahora en puntitos de luz que me esperan ansiosos cada dia en la pantalla de mi pc.
Con una paciencia infinita me ha aceptado como alumna torpe; como leo testaruda y malhumorada con lo que se le escapa; como Guadiana que cuando toca la crecida no le deja descansar y le acosa con preguntas... y en sequia se retira en un silencio frustrado que no admite réplica, solo maduración y lluvia.
con mucho humor, grandes dosis de conocimiento, mas humor, paciencia y mucha mas paciencia.... está enseñándome de nuevo a jugar con la luz, a plasmar mi sombra en las sombras, a escribir la risa en los cielos o realzar colores que canten.
Gracias por devolverme a mi antigua amante, la pasión y el pulso de la fotografia!!!
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